Ana Hérica Ramos destaca la labor de la congregación de los Sagrados Corazones
Coordinan la colaboración de empresas y el trabajo del voluntariado para remitir ayuda a Mozambique, Filipinas, India y Congo
La delegada de Coordinación de Distritos y Voluntariado, Ana Hérica Ramos, ha mantenido un encuentro con el padre Adolfo Sastre, y sus colaboradores Joaquín Garre y Lucas Gil, para conocer personalmente la labor social que realiza la congregación de los Sagrados Corazones, que cuenta en Jerez con un nutrido grupo de voluntariado que se vuelca para reunir materiales de ayuda destinados a Mozambique, Filipinas, India y Congo.
Esta congregación almacena en Jerez materiales de papelería, muebles para escolares, ropa, zapato, ropa de cama, material ortopédico, jabón, que conformará el próximo envío de ayuda en cuanto sea posible ese envío en un contenedor una vez que pase la alerta sanitaria. En la actualidad utilizan como almacén una nave gracias a la colaboración de una empresa jerezana. La delegada Ana Hérica Ramos se ha interesado por esta situación de provisionalidad, y ha trasladado al Padre Adolfo Sastre la tramitación necesaria para solicitar formalmente la cesión de un local al Ayuntamiento.
La delegada Ana Hérica Ramos ha destacado que “estamos conociendo la labor que realiza la comunidad de los Sagrados Corazones, con el tema de la cooperación para el desarrollo. Llevan ya más de diez años trabajando con países como Mozambique, la India, Congo, Filipinas, y hemos visto los materiales que logran aglutinar gracias a la solidaridad jerezana, material sanitario, educativo, que llegan como agua de mayo a estos lugares donde la necesidad y la precariedad aprietan”.
El padre Adolfo ha explicado que “con el voluntariado tenemos varias tareas, como es el envío de contenedores con ayuda que ellos necesitan, no lo que nos sobra a nosotros. Hay un equipo de voluntarios en Jerez, San Fernando, y Carcabuey, que trabajan en la organización y empaquetado del material para su envío. Enviamos estos contenedores todos los años, dentro de nuestras posibilidades”.
Lucas Gil ha incidido en señalar que “los productos que mandamos son cosas que aquí no les damos mucha importancia, pero ellos lo reciben como una bendición. El caso del jabón por ejemplo, ahora es con la pandemia es cuando nosotros nos hemos dado cuenta de que el jabón tiene una misión importante con la salud. Nosotros utilizamos medicina cuando estamos enfermos, ellos utilizan jabón, y nosotros tenemos compañeros en San Fernando que lo fabrican reutilizando el aceite”.
Por su parte, Joaquín Garre, destaca que “yo recibí uno de estos contenedores cuando vivía allí en Mozambique, en los tres años que estuve allí al servicio de la congregación, y es un regalazo. Es bueno que la gente sepa que se genera una corriente de solidaridad en las dos direcciones que es muy buena, y eso es lo que intentamos los religiosos, las parroquias a su vez generan grupos de Cáritas, y eso va generando comunidad, que a través de proyectos, va generando riqueza, y eso es importante que se sepa para que se sume más gente a ayudarnos”.
La congregación de los Sagrados Corazones cuenta en Jerez con el apoyo, entre otras entidades, del colegio Altillo School, con el que mantienen un contacto estrecho apostando por la sensibilización del alumnado. El padre Adolfo incide en señalar que “para nosotros lo más importante es sensibilizar sobre que somos privilegiados, que debemos compartir, y que debemos recibir a las personas que vengan de fuera con respeto”.